Las guirnaldas y coronas de Navidad, tradicionalmente como “Coronas de Adviento”, simbolizan precisamente el transcurso de las cuatro semanas de Adviento. El modelo original de la Corona de Adviento empezó a partir de ramas de abeto y cuatro velas que se encendían el primer domingo de Adviento y los tres domingos siguientes, cerrando así el ciclo de las cuatro estaciones del año.